Como es sabido el pasado 23 de abril la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, firmó la iniciativa de ley SB 1070, con entrada en vigor a los tres meses de su firma, la cual criminaliza la estancia ilegal en ese Estado, ésta permitirá detener a cualquier persona a la que se considere sospechosa y se le levantarán cargos delictivos si no se comprueba la estancia legal en ese lugar.
La aprobación de esta ley nos demuestra el desconocimiento total de la Declaración Universal de los Derechos Humanos adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas por la Resolución 217 A (III), por parte de la gobernadora de Arizona, esta declaración en sus artículos 1o. y 2o. establece que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos, sin distinción alguna por cuestiones de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición, por lo que dicha ley es totalmente violatoria de los derechos humanos de las personas con características raciales de inmigrantes que viven en ese Estado.
La comunidad latina en el Estado de Arizona será objeto de discriminación con la entrada en vigor de esta ley la cual resulta inconstitucional y violatoria de derechos fundamentales, la competencia en cuestiones de migración en la Unión Americana corresponde a la Federación por lo que éste Estado no se encuentra facultado par a promulgación de leyes en esta materia, por lo que no se justifica el argumento de la señora Brewer respecto a que se legisló al respecto, en virtud de la falta de acción por parte de la Federación en el tema.
Atendiendo a la forma de control constitucional difuso de las leyes con el que cuenta es Estado americano, con el cual cualquier juez esta en posibilidad de desaplicar una ley contraría a la constitución como es el presente caso, esperemos que se logre revertir los efectos de esta ley SB 1070 y no se afecten los derechos de más de 460 mil inmigrantes que viven en dicho Estado, aunado a los actos de molestia que se causen a las personas que cuenten con residencia legal por el simple hecho de las características raciales con las que cuentan ya que se considera que de 6.5 millones de personas que habitan el Estado, 1.9 millones (30%) son de origen mexicano.
Ahora es el momento en el que debe existir una condena por la comunidad internacional en contra de este tipo de medidas extremas, hasta ahora el gobierno mexicano por medio de su embajador en Washington, ha hecho pública una nota en donde lamenta la decisión de la gobernadora y anuncia que nuestro país empleará todos los recursos diplomáticos, políticos y económicos a su alcance para dar respuesta a la ley.
La inmigración es un fenómeno social que se da en su mayoría por cuestiones económicas, ante la falta de oportunidades de desarrollo de los migrantes en su lugar de origen, como evento social debe ser regulado y los Estados de cualquier parte del mudo se encuentran legitimados para ello, no obstante éstos se encuentran obligados a respetar la dignidad de las personas en su regulación, lo cual no ocurre en el caso de Arizona por lo que resulta imperante la aprobación de una ley migratoria a nivel nacional en los Estados Unidos que integre la participación de la fuerza laboral que ha contribuido a construcción de esa nación que la ha convertido como la más potente del mundo.
La aprobación de esta ley nos demuestra el desconocimiento total de la Declaración Universal de los Derechos Humanos adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas por la Resolución 217 A (III), por parte de la gobernadora de Arizona, esta declaración en sus artículos 1o. y 2o. establece que todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos, sin distinción alguna por cuestiones de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición, por lo que dicha ley es totalmente violatoria de los derechos humanos de las personas con características raciales de inmigrantes que viven en ese Estado.
La comunidad latina en el Estado de Arizona será objeto de discriminación con la entrada en vigor de esta ley la cual resulta inconstitucional y violatoria de derechos fundamentales, la competencia en cuestiones de migración en la Unión Americana corresponde a la Federación por lo que éste Estado no se encuentra facultado par a promulgación de leyes en esta materia, por lo que no se justifica el argumento de la señora Brewer respecto a que se legisló al respecto, en virtud de la falta de acción por parte de la Federación en el tema.
Atendiendo a la forma de control constitucional difuso de las leyes con el que cuenta es Estado americano, con el cual cualquier juez esta en posibilidad de desaplicar una ley contraría a la constitución como es el presente caso, esperemos que se logre revertir los efectos de esta ley SB 1070 y no se afecten los derechos de más de 460 mil inmigrantes que viven en dicho Estado, aunado a los actos de molestia que se causen a las personas que cuenten con residencia legal por el simple hecho de las características raciales con las que cuentan ya que se considera que de 6.5 millones de personas que habitan el Estado, 1.9 millones (30%) son de origen mexicano.
Ahora es el momento en el que debe existir una condena por la comunidad internacional en contra de este tipo de medidas extremas, hasta ahora el gobierno mexicano por medio de su embajador en Washington, ha hecho pública una nota en donde lamenta la decisión de la gobernadora y anuncia que nuestro país empleará todos los recursos diplomáticos, políticos y económicos a su alcance para dar respuesta a la ley.
La inmigración es un fenómeno social que se da en su mayoría por cuestiones económicas, ante la falta de oportunidades de desarrollo de los migrantes en su lugar de origen, como evento social debe ser regulado y los Estados de cualquier parte del mudo se encuentran legitimados para ello, no obstante éstos se encuentran obligados a respetar la dignidad de las personas en su regulación, lo cual no ocurre en el caso de Arizona por lo que resulta imperante la aprobación de una ley migratoria a nivel nacional en los Estados Unidos que integre la participación de la fuerza laboral que ha contribuido a construcción de esa nación que la ha convertido como la más potente del mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario